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Cable submarino conecta redes de energía limpia de Alemania y Noruega

Alemania y Noruega inauguraron el pasado jueves, un cable submarino que conecta sus redes eléctricas con el fin de reforzar la alimentación de los dos países en electricidad "verde" fomentando con ello la transición energética a escala en el viejo continente.

El mar del Norte separa al municipio alemán de Wilster, cerca de la desembocadura del Elba, de la localidad de Tonstad, al sur de Noruega. Entre ambas orillas transcurre NordLink, uno de los cables eléctricos submarinos más largos del mundo, que representa una promesa de energía menos contaminante para una de las potencias económicas más grandes del mundo.

La línea que tiene 623 kilómetros, de los cuales 516 se encuentran bajo el mar, entró en servicio en abril de este año, pero fue objeto de una ceremonia telemática de inauguración el pasado jueves, con el acompañamiento de la canciller Angela Merkel y la primera ministra noruega Erna Solberg.

El proyecto "es un paso importante para el giro energético alemán y la integración del sistema eléctrico europeo" afirmó Thorsten Lenck, del centro de reflexión Agora Energiewende, que se encuentra a cargo del estudio de la transición energética alemana. Las energías renovables representaron por primera vez la mitad de la producción de electricidad en Alemania en 2020, contra 25 por ciento hace menos de diez años, según el instituto de investigación Fraunhofer.

Pero Alemania, aún está lejos de alcanzar la neutralidad climática, que se ha fijado para 2045. Su economía, que consume mucha energía, deberá compensar el cierre de las últimas centrales nucleares del país en 2022, y la salida del carbón antes de 2038.

Conocido como el "cable verde", NordLink facilita el intercambio de energía eólica o solar producida en Alemania por la energía hidroeléctrica producida en Noruega.
Este procedimiento compensa las fluctuaciones de la oferta de energías renovables, dependientes del viento, del sol o de la lluvia, sin necesidad de recurrir a la energía fósil o nuclear.
La interconexión entre Noruega y Alemania contribuye a garantizar el suministro: cuando no sopla bastante viento o no hay sol, la electricidad procedente de las centrales hidroeléctricas noruegas podrá ser llevada hacia la central de conversión instalada en Wilster, en el Schleswig-Holstein. NordLink funciona a doble sentido, con lo que la energía eólica alemana es enviada a Noruega, donde puede ser almacenada o utilizada.

Fuente: DW.
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Modificado por última vez en Martes, 01 Junio 2021 15:18

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