Nuestra edición PERFILES está dedicada en esta oportunidad a uno de los científicos e investigadores que sin duda más le ha aportado al país desde sus conocimientos ingenieriles al campo de la electricidad y puntualmente al estudio de los RAYOS.
Se trata de Francisco José Román Campos, Investigador Emérito del Ministerio de Ciencia y Tecnología de Colombia (2020), Profesor Titular (2004) con Tenencia de Cargo (2013) en el Departamento de Electricidad y Electrónica de la Universidad Nacional de Colombia (UNC), Bogotá.
RESÚMEN
Es bien sabido que el ser humano es muy sensible a los efectos de las corrientes eléctricas altas. Una posible fuente de corrientes eléctricas elevadas, presente en el entorno electromagnético del ser humano, son las descargas eléctricas atmosféricas o rayos. Por otra parte, en las subestaciones, los campos eléctricos elevados pueden inducir corrientes eléctricas que fluyen a lo largo del cuerpo de las personas que trabajan en este ambiente electromagnético. De forma semejante, las corrientes producidas por los rayos pueden afectar a las personas ocasionando desde lesiones leves hasta incluso la muerte.
La subestación Portugal, ubicada en Engativá, tiene una capacidad de 40 millones de voltamperios (MVA), y será la encargada de proveer la energía para el funcionamiento de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Salitre, obra clave en la descontaminación del río Bogotá. Además, atenderá la creciente demanda del occidente de Bogotá, por la Avenida Calle 80 (Autopista Medellín), el cual es un eje principal en el desarrollo de la ciudad y municipios aledaños.
Condiciones geográficas y climáticas
El reciente estudio “Where are the lightning hotspots on Earth?” de Rachel Albrecht [1] ratifica lo ya ampliamente conocido en Colombia: la actividad de rayos en nuestro país es particularmente alta, como se observa en la figura 1 y en la tabla 1, lo cual tiene implicaciones muy serias para la seguridad de las personas y la confiabilidad de los sistemas eléctricos y electrónicos.
