La adjudicación de las obras fue otorgada por TransMilenio el 15 de noviembre de 2019 y desde abril de 2020 se avanza en su puesta en marcha, a través de la culminación de los diseños, la obtención de los permisos ambientales, la demolición de los edificios, la construcción de bases para el cerramiento, la realización de los Planes de Gestión Social con las comunidades, las excavaciones, la instalación de las estructuras de electrolineras y la importación de los cargadores eléctricos principalmente. De esta forma, se estima que la compañía entregara tres patios, ubicados en las localidades de Fontibón y Suba, antes de finalizar el presente año y uno más ubicado en la localidad de Usme, durante el primer trimestre de 2021.

“Con el desarrollo de la infraestructura eléctrica y de carga requerida para el funcionamiento de 477 buses eléctricos, nos sumamos al momento histórico que va a vivir Bogotá en materia de movilidad, al incorporar en su flota de transporte público esta tecnología limpia, que la convertirá en una de las primeras ciudades de Latinoamérica con la mayor flota de vehículos eléctricos, lo que sin duda trae importantes beneficios para la ciudadanía; no sólo en términos de movilidad, sino también en calidad de vida, salud y cuidado del medio ambiente”, aseguró Lucio Rubio Díaz Director General de Enel en Colombia.

Las electroterminales suman un área aproximada de 50.000 m² y cada una cuenta con zonas administrativas, de parqueo, mantenimiento y recarga. Estas últimas funcionarán con una potencia instalada entre 9 y 11 megavatios (MW), lo que permitirá cargar los e-buses en un lapso de dos a cuatro horas. Con la batería completa, los articulados podrán recorrer 260 km.

Una vez Enel X finalice el trabajo, su parte Enel-Codensa será la encargada de brindar soporte, asesoría y mantenimiento preventivo y correctivo a la infraestructura eléctrica, con el fin de permitir que los buses operen de manera efectiva y eficiente.

La adecuación de los patios que adelanta Enel X, contribuye para que Bogotá sea una ciudad sostenible. Con la entrega de estos, la capital se convertiría, junto con Santiago de Chile, en una de las ciudades con mayor flota de buses eléctricos de Latinoamérica; mientras que Colombia sería uno de los tres países pioneros del continente en materia de movilidad eléctrica masiva, un podio que actualmente ocupan Estados Unidos y Chile.

Igualmente, este proyecto impacta el cumplimiento de dos grandes metas estatales: que Colombia cuente con 60,000 vehículos eléctricos en 2030 y que para 2025 todos los vehículos nuevos del sistema de transporte público sean amigables con el medio ambiente.

Los e-buses y sus respectivas zonas de carga representan una importante disminución en la contaminación auditiva y ambiental de la cuidad. Se estima que con ellos se emitan anualmente 60,000 toneladas menos de CO2 y que se obtengan ahorros de más del 43% en el uso de energía eléctrica comparado con combustibles fósiles.

“Cuando hablamos de sostenibilidad debemos considerar tres factores clave: el social, el medioambiental y el económico. Con este proyecto integramos eficientemente los tres; contribuimos a la salud y al bienestar de los ciudadanos, disminuimos la huella de carbono de los buses del SITP y proporcionamos un sistema de transporte mucho más rentable”, manifestó Rubio.

Fuente: Enel.