La región administrativa de Ceilândia, en Brasil, ha agilizado los tramites para facilitar los permisos de instalación de plantas de energía renovable: mientras que la concesión de la licencia ambiental para este tipo de instalaciones tarda normalmente algunos meses, en el caso de la planta de Ceilândia, el tiempo de emisión fue tan solo de una semana.
En el transcurso de la semana pasada, fue inaugurada la planta de generación, que se trata de la mayor central fotovoltaica del del distrito federal brasilero. La producción alimentará la subestación de la Compañía de Energía de Brasilia (CED) de la región y será deducida de lo consumido por la empresa Claro. La empresa es una asociación público-privada (PPP) del Ejecutivo con RZK Energia y el operador telefónico.
El Gobernador del estado federal, el señor Ibaneis Rocha, acudió a la inauguración de la planta, que ocupa una superficie de aproximadamente 12 hectáreas en el norte de Ceilândia y cuenta con 18.000 módulos fotovoltaicos.
Como fuente de generación renovable, la energía fotovoltaica contribuye positivamente a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero con un impacto positivo de aproximadamente miles de toneladas de CO2 en la atmósfera. Se estima que la inversión inicial para la construcción de la planta, ascendió a unos R$ 26 millones (US$ 6,3 millones) por parte del Instituto Brasilia Ambiental (Ibram).
